Núria Parlon: “Seré la voz de Santa Coloma en el Parlament”

ENTREVISTA A LA CANDIDATA

• La número 3 del PSC afirma que con Mas se han destruido 135.000 puestos de trabajo

• La alcaldesa revela que la Generalitat debe a la ciudad 14 millones de euros

• La líder socialista apuesta por el federalismo como encaje de Catalunya en España

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–¿Deme su versión de los incidentes del 14-N en Santa Coloma? 

–La valoración del día de Huelga General y la manifestación en Santa Coloma es claramente positiva, igual que por la tarde en Barcelona. Fue un éxito de asistencia, de gente contraria a las políticas de recortes que llevan a cabo tanto el PP como CiU. La marcha, convocada por la Mesa Cívica, en la que está el PSC, transcurrió de una manera cívica y pacífica. Pedimos una manera distinta de salir de la crisis. Otra cosa fueron los incidentes que se produjeron al final de la manifestación, a todas luces intolerables, provocados por una minoría que no defiende sus ideas con respeto. No puede ser que se registren agresiones verbales y se ataque con pintura la sede el PSC o la de CiU.

–¿Identificó usted a alguien de algún partido entre esas personas?

–Los puede identificar cualquiera. Son personas conocidas por sus vinculaciones a determinadas plataformas. Santa Coloma es como un pueblo, y las caras eran conocidas que apoyaban determinadas consignas y actitudes.

–¿De Gent de Gramenet?

–Algunas personas son claramente simpatizantes de Gent de Gramenet, eso es innegable. En las fotos que tenemos se puede ver. Insultaban solo al Partido Socialista.

–¿Por qué ahora ustedes defienden el federalismo?

–El PSC ha defendido siempre el federalismo.

–A veces se ha notado poco.

–Ahora lo que pasa es que hay gente que defiende el independentismo sin haber sido independentista, como es el caso de Convergència i Unió. En cambio, el PSC ha sido siempre un partido federalista. Siempre que ha gobernado ha tenido como eje el federalismo. De hecho es la apuesta de Pascual Maragall…

–…Maragall sí era federalista…

-…Y José Montilla. Ambos apostaron por el nuevo Estatut. Todos somos federalistas. Lo que sucede es que nosotros no hemos hecho del eje nacional nuestro eje prioritario.

 –Eso ahora, porque en el 77 el PSC-PSOE defendía el derecho a la autodeterminación.

–Eso forma parte del consenso político de la época. Había distintas sensibilidades, que fueron la locomotora del PSC, un partido que ha hecho posible la unidad cívica catalana. Una unidad que algunos quieren romper ahora polarizando a la ciudadanía y escondiendo sobre un producto de márquetin, como es la independencia, otras cuestiones. Para nosotros el territorio tiene que garantizar la igualdad de oportunidades. CiU, con las elecciones anticipadas, está escondiendo una política que le hubiera ocasionado un desgaste muy fuerte, porque la crisis la están pagando las clases medias y trabajadoras, y esto es la realidad. ¿Qué está pasando aquí? ¿Qué me gustaría destacar?

–¿Está diciendo que CiU no se cree lo del Estado Propio?

–Quiero decir que no era necesario convocar elecciones, porque tienen una mayoría muy amplia en el Parlament y contaban con las complicidades de ERC e Iniciativa. ¿Por tanto, qué necesidad había de convocar elecciones? No puede ser que tan solo con una reunión con Mariano Rajoy para plantearle el Pacto Fiscal, similar al Concierto vasco, se abra el camino de unas nuevas elecciones. Mi pregunta es: ¿Si eres capaz de ponerte de acuerdo con él para pactar una Reforma Laboral lesiva para los trabajadores que, además invade las competencias de Catalunya, si pactas eso no se entiende que rompas el diálogo en una sola reunión para mejorar la financiación de Catalunya. Artur Mas nos despista a todos, porque cuando va a Europa nos da lecciones de federalismo, pero luego es incapaz de pactar con su socio en Madrid.

–Al margen de intereses políticos, creo que mucha gente tiene la sensación de que a Catalunya la maltratan, que faltan infraestructuras, que el idioma es atacado…

–Eso no es justo decirlo, porque la inmersión lingüística lo ha protegido.

–-Pero el PP lo ha atacado aquí, en Baleares y en Valencia.

–Razón de más para no comprender por qué CiU pacta políticas que perjudican a los catalanes.

–¿No cree que la gente corriente está harta de crisis y del poco respeto hacia Catalunya? ¿Eso quedó claro el 11 de Setiembre, no le parece?

–La gente está descontenta porque no tiene trabajo, porque hay un 52% de jóvenes sin oportunidades y que el conseller de Treball tiene la ocurrencia de mandar a los más preparados a Londres a servir cafés y así aprenderán inglés, la gente está descontenta porque no puede pagar la hipoteca, los mayores de 50 años están preocupados porque no volverán a trabajar… Hacer una correlación solo con el eje nacional es arriesgado y llevar a la ciudadanía hacia la frustración una vez celebradas las elecciones del 25N, también. La propuesta federalista puede ser más o menos complicada, puede tener más o menos amigos más allá del Ebro, pero es una propuesta escrita que está sobre la mesa. Pero, ¿cuál es la propuesta de CiU?

–¿Dígamela usted?

–¿Dónde está escrito el camino hacia la independencia?

–De momento, la palabra independencia no está en el vocabulario de Artur Mas. Habla de Estat Propi.

–Si las herramientas que quiere se contraponen al resto del Estado, eso tiene un nombre: independencia. En este sentido, me parece más integrador el discurso de ERC que el de CiU, que se arroga el sentimiento de todo un pueblo.

 –Las encuestas les dan a ustedes un resultado entre malo y catastrófico.  ¿Qué impresión tiene usted?

–Las elecciones nos han cogido en un momento de renovación del partido, por tanto, eso supone una desventaja clara para afrontar una contienda electoral, que se ha avanzado sin ninguna razón y solo para tapar los fracasos de CiU en el asunto laboral. Recuerdo que prometieron que crearían un 50% más de empleos y, en cambio, se han destruido ya 135.000 puestos de trabajo. Se han cerrado más de 40.000 pequeñas y medianas empresas, porque no ha habido una política de reactivación económica. En materia social se han recortado prestaciones de un modo indiscriminado en cualquier ciudad del área metropolitana. A Santa Coloma nos deben 14 millones de euros, eso nos dificulta hacer frente a muchos servicios.

–-¿Y eso les pasará factura porque les ha pillado a ustedes a contrapié?

–Bueno sí, cuando estábamos en pleno proceso de renovación del partido y con una nueva dirección. Pero, las encuestas revelan un dato interesante y es que hay mucha gente de izquierdas o cercana que está indecisa y nos tenemos que dirigir a ellos en esta campaña. Hemos de convencerlos para que vayan a votar. Nuestra campaña, que está muy pegada al territorio, se basa en tratar de movilizar a la gente. Hacemos muchos actos de pequeño formato para tener un contacto directo con los ciudadanos y poder explicarles nuestras propuestas. Para algunos, a lo mejor su interés es que el PSC deje de ser segunda fuerza política para que lo fuera el PP, con el que CiU ha pactado toda la agenda social y demás políticas, como por ejemplo el Ayuntamiento de Barcelona y la Diputación. Los pactos son evidentes.

–-¿Usted cree que eso puede pasar?

–Esto es una carrera de fondo, muy complicada, por las dificultades por la que atraviesa nuestro electorado, que lo está pasando muy mal con la crisis. Y eso desmoraliza y desmoviliza para ir a votar. Puede que no acaben de ver una alternativa real con nadie. Y ese es el trabajo que tenemos que hacer ahora. Nuestro candidato es un hombre honesto que es alcalde de Terrassa, al que avala una gestión diferente a las políticas conservadoras. Por ejemplo, se ha opuesto de una manera firme a los desahucios, porque para nosotros las personas tienen nombre y apellidos y forman parte de nuestra realidad.

–Pere Navarro no es muy conocido.

–No. Acaba de ser elegido en un Congreso, pero no ha podido rodarse.

–El número uno es alcalde y el tres es usted, que también lo es. ¿A los alcaldes les toca sacar ahora as castañas del fuego?

–Somos un partido de base municipalista desde siempre. Y en este caso nuestro votante más desmovilizado se encuentra en el área metropolitana. De ahí a focalizar mucho la campaña en esta zona.

–¿Su objetivo es superar los 12.726 votos obtenidos en las últimas autonómicas?

–Espero, ya que ofrecemos a Santa Coloma tener voz en el Parlamento de Catalunya. Aunque fuera desde la oposición sería muy importante para la ciudad, porque la realidad y los problemas de Santa Coloma se tendrán en cuenta a la hora de legislar y de buscar soluciones. Además son circunstancias muy parecidas a las de otras ciudades del entorno.