- El Gobierno local refuerza la atención social ante la grave crisis, pero sus recortes no gustan a la oposición
- La partida de Cultura se reduce un 20% y afectará a la Festa Major y otras celebraciones
- Siscu Sánchez afea a Gent de Gramenet que vote conjuntamente una moción con Plataforma per Catalunya
- PSC, PP, ICV-EUiA, Gent y CiU condenan la agresión a un periodista en el pleno de septiembre
- La oleada de visitas ha convertido a esta crónica en la noticia catalana más destacada en WordPress
Intervención de un vecino en el largo pleno municipal, anoche.
Gramenet 2.0, número 1 en WordPress, hoy.
Fue un pleno rocoso e interminable. En ocasiones crispado y tenso, aunque en otras hubo debate; vehemente y demagógico, a veces, pero debate al fin al cabo. Hubo dardos envenenados y contraste de ideas en una sesión que se aprobaron los presupuestos más austeros de los últimos seis años, con tan solo 96,1 millones de euros para atender las necesidades de Santa Coloma. Lo más relevante ahora es que se refuerzan los servicios sociales para tratar de proteger a los ciudadanos más azotados por la crisis. Lo demás son recortes, que el concejal Esteve Serrano define simpáticamente como ajustes. El caso es que la disminución del 24% del presupuesto se nota en todas las áreas, incluida la limpieza pública, y llega a ser dura con Cultura, que tendrá un 20% menos de dinero para la Festa Major y otras celebraciones.
Que no están las cosas para fiestas se vio desde un principio. El portavoz de Gent de Gramenet, Aitor Blanc, dijo que el presupuesto es desequilibrado y parte de un déficit de 800.000 euros. “Los recortes de servicios contrastan con la alegría en las áreas de Alcaldía y Servicios Centrales”, subrayó. A continuación culpó a Gramepark de condicionar las cuentas municipales desde que estallara el caso Pretoria en el 2009. Pero, Blanc no se detuvo ahí, sino que vino a decir que las cosas seguían más o menos igual (de sucias) en el Ayuntamiento, que cada vez invierte menos en la ciudad y paga más intereses a los bancos. Afirmó que el Gobierno local recorta los derechos de los trabajadores municipales, mientras no toca el sueldo de los mantenidos; “cargos de confianza”, puntualizó.
Las duras acusaciones provocaron las reacciones de los representantes de todo el equipo de Gobierno. Por el PSC, intervinieron Esteve Serrano, Lídia Guinart, Jordi Mas y Raül Moreno; por ICV-EUiA, Siscu Sánchez, y en nombre de CiU, Carles Combarros. Todos hicieron piña y saltaron en distintos momentos del debate para defender la honorabilidad del Gobierno. “Dejen de criminalizarnos porque tenemos congelados los sueldos desde hace cuatro años”, manifestó Serrano, visiblemente molesto con Blanc y las personas del público que coreaban sus intervenciones.
Durante el debate quedó claro que Gramepark condiciona las cuentas municipales y que el presupuesto ha bajado por el recorte a esta empresa. Pero, en realidad, el Ayuntamiento dispondrá de solo tres millones menos para inversiones y servicios, ya que pasa de 81 millones a los 78 actuales. Además, el Consistorio está pendiente de algunas aportaciones de otras administraciones (Generalitat, Diputació y Área Metropolitana), que todavía no han elaborado sus presupuestos.
Según la responsable del área Económica, Lídia Guinart, esta circunstancia provoca que no se puedan cerrar determinadas partidas ni algunos compromisos con los empleados municipales. Anoche, sus representantes hicieron una durísima intervención contra el equipo de Gobierno, al que acusaron de usar la tijera siempre con los mismos y no con los cargos de confianza. La alcaldesa Núria Parlon se comprometió públicamente a reunirse con ellos y subrayó que lo principal, lo tienen. “Se garantizan todos los puestos de trabajos, fijos o eventuales”, recalcó.
En un tono comedido, la portavoz del PP, Mari Carmen Sáez, acusó a los socialistas de haber despilfarrado. Les recordó que en el año 2003, el Gobierno del PP aprobó el Plan de Insuficiencia Económica para Santa Coloma y que, sin embargo, el déficit se ha ido acumulando año tras año. “Pagamos 14.500 euros de intereses al día”, criticó. Pese a las discrepancias, Sáez tendió una mano al Gobierno local para remar juntos en el mismo sentido. No obstante, Sáez anunció la presentación de alegaciones al presupuesto para tratar de mejorar la limpieza pública y recortar determinados sueldos. Ahora, el presupuesto estará un mes de exposición pública antes de su aprobación definitiva.
Inesperadamente hubo también polémica en la discusión de una circular “inocente”, que trataría de garantizar el derecho a la información de los concejales. Para el equipo de Gobierno se trata de una especie de manual de uso para los concejales nuevos, pero Gent ve en ella poco menos que al diablo. Para Aitor Blanc, la circular tiene como objetivo limitar precisamente el acceso libre a la información, ya que contiene un conjunto de normas que dificultan en acceso a los documentos. En este punto, Blanc se quedó solo, ya que la líder del PP se sumó a la propuesta del Gobierno. Llegeix la resta d’aquesta entrada »